Y vivir al amparo de la naturaleza, sin más prisas que el caer de las hojas en otoño, y la ropa tosca de algodón para vestir mi cuerpo.
Necesito pocas cosas para vivir en paz, una vida sencilla, y alguien que me quiera y me lo diga de vez en cuando, sin que mi cuerpo necesite mas calor que el de un abrazo, y el olor de tu pelo en el viento.
Sería lo mejor de la vida ver pasar el río, aunque necesite el azul del mar, y el arrullo de las olas, y mis piés pisando la arena.
ANONIMO